CAMINAR CON BANDA SONORA:
(
pequeño homenaje a JUGLARES,
TROVADORES Y ANIMADORES
DE MARCHA)
Esta
noche quiero dar
gracias a Dios
por unas personas
muy especiales: por
todos aquellos que con un
simple instrumento musical
y unas sencillas
notas son capaces
de ponerle “ banda
sonora “ a momentos
importantes ( y
menos importantes ) de
nuestros caminos y
nuestras vidas cual mágicos
flautistas de
HAMELIN .Un día
como espectador privilegiado
y sorprendido cuando
tenía apenas 18
años y como “extra
“ contratado a destiempo
en la película GENERAL
PATTON , vi en
la plaza de
la catedral de Almería (que
simulaba ser Palermo
en el sur
de Italia) un
enorme elenco de banda de
gaiteros escoceses , del
ejercito británico que en
silencio (las notas se
las ponían en
la película) desfilaban
triunfalmente para recrear
la toma por
los aliados de
la ciudad italiana. Pregunté a
mis compañeros que
sentido tenía aquello. Me
dijeron que era
una banda militar
mas, que en
los momentos decisivos
animaba con sus
notas el paso
de los ejércitos combatientes
en la segunda
guerra mundial. Quizás fuera
a raíz de
ver la bonita
película en 1987
titulada LA MISION, que
quedara impactado por
su bella banda
sonora con música de
EMNIO MORRICONE.En aquella
ocasión aquellos fotogramas
acompañados de la música
de
MORRICONE te elevaban
a una espiritualidad y
altura inmensurables. No
digamos lo que
cambia la calidad
de una buena película
una
también buena banda
sonora.
Sin
banda sonora la película
de
nuestras vidas no
vale nada. Y además es
muy triste. Meditaba yo
estos días en
torno al pasaje
de Lucas 2,1-14,
el evangelista de
la ternura, en
su pasaje del
pesebre del nacimiento
de Jesús de
Nazaret que por
mucho que lo “ adorne” , aquello tuvo
que ser de
lo mas frio
y triste que
se pueda uno imaginar y
que solo podía darle
calor y alegría la
solidaridad de las
personas que por allí
pasaban… los pobres
de siempre los
pastores, los transeúntes . Imaginaros la “nochecita
“ un matrimonio joven, con
“mala pinta “ por los
avatares del viaje,
caminos pedregosos, incomodidad,
suciedad, sin encontrar
posada y con un
leve “ tufillo “ a sospechosos.
El evangelista hace
un esfuerzo por
ponerle una cierta
“banda sonora celestial¨
para animar “el
catarro”, fijaos en las
notas musicales que
pone como género
literario :
<<En torno al ángel apareció una
legión del ejercito
celestial , que
alababa a Dios, diciendo: - Gloria a
Dios en el
cielo, y en
la tierra, paz a los
hombres que ama el
Señor>>
Y
es que a
veces necesitamos en
nuestros caminos de
la vida, en
determinados momentos de
nuestra vida, más
complicados o más
sencillos, alguien que
le ponga una
pequeña nota musical
a nuestras dificultades.
Incluso la “filosofía scout “
nos aconseja aquello
de “cómo no
te cuides tu
no sé quién
lo va a
hacer por ti” y
por eso con
mucho pragmatismo nos decía un
bello y práctico
artículo de la
ley scout : “El
SCOUT ES ANIMOSO,
Y SONRIE ,
Y CANTA ANTE
PELIGROS Y DIFICULTADES “
SI,SI…EL FAMOSO
ARTICULO OCTAVO DE LA LEY
SCOUT: y por
eso en determinados
momentos de nuestra
vida, los que
hemos sido scouts,
nos hemos visto sorprendiéndonos
a
nosotros mismos cantándonos en
momentos de “TIERRA
TRAGAME”
El
papel de los “animadores “ de
marcha suponía el
liderar canciones que
entonase el grupo
en los momentos
difíciles de la
marcha, cuando hasta
la “moral “ se te escurría
por
debajo de las
mochilas. Cuando veías al
grupo “jodido” protestando
de la dureza
de la marcha,
preguntando qué cuanto
quedaba para llegar,
con los goterones
de sudor cayéndoles a
destajo, quedándose atrás,
rompiendo el grupo,
y de pronto…ay
de pronto, que surgía el
que cogía la
guitarra y pegaba
cuatro gritos y
contagiaba al grupo
que se ponía a
cantar, y entre
otras recuerdo aquella
de : << la vida pirata
se vive mejor,
sin trabajar, sin estudiar…coooon la
botella de ron>>
Les cambiaba hasta
el rostro, se
iluminaban y entonces
te dabas cuenta
que no eras tú el
que tiraba del
grupo …sino que
eran ellos, los
que ahora metían “la
turbo” y como
no acelerases, te
quedabas atrás…
Bueno
pues en esa línea, esta
noche, para “que
el portal no
se quede triste”
y sabiendo que
muchos estarán “en Belén con
los pastores “. QUIERO
ACORDARME Y DARLE
GRACIAS A DIOS, por
todos aquellos bienaventurados y
benditos o improvisados
juglares o trovadores
que le pusieron
notas musicales a mis horas
y a mis
caminos, empezando por
mi madre y sus famosas
“nanas” para dormirme,
o las mismísimas “nanas “
de mis tías y
abuelas, en ausencia de
mi madre , la musiquilla
de “Miguelillo “ el alguacil
de Roquetas de Mar,
que me hacían babear
o me dejaban
con la boca
abierta de ver
aquellas milagrosas notas
que convocaban al pueblo, las
de Patro, mi
vecina en Tetuán,
cantando unas inigualables
jotas aragonesas en
el patio de
vecinos, o las notas
de opereta italiana del
brigada Dionisio, cada
vez que se
afeitaba o se metía en
la ducha. Los solemnes
entonados de las
bandas militares incluido
el himno de
la legión, con
el que tantas veces (y
lo digo en
serio ) afronté
momentos difíciles de mi vida. Te
subía el himno
la moral. O los
sones de gaitas
lejanas de las
bodas morunas en
aquel Tetuán nocturno .O
también el famoso
“paquitochocolatero “ en las
fiestas de los pueblos.
Qué duda
cabe que todos, en
determinados momentos necesitamos
escuchar nuestra “banda
sonora” que inmortalice
el momento. Que subidon.
Gracias
a todos. Gracias por
amenizarme horas, minutos
y segundos.
Pero
especialmente quiero bendecir
y dar gracias
por todos aquellos
scouts y montañeros
que animaron nuestras
travesías por caminos
duros, travesías integrales
montañeras con nieve,
calor, viento, barrancos y precipicios
y cuyas notas
animaban a los
que caminábamos con
nuestra mochila al
hombro, el anorak
o la camisa
empapada en sudor.
Porque nos hicisteis
el camino más
leve y llevadero. Quiero traer aquí
a
la memoria algunos
nombres con el
temor de olvidarme
de otros muchos
pero empiezo: A José Moncada, y
a José Gil
del club de
montaña universitario de
Granada, A Baguira, Aguilera en
Scouts , A Iñigo
Soto, en Montañeros
de Santa María , que
nos deleitaba con
sus canciones hasta
altas horas de
la noche en
las veladas y
fuegos montañeros, a Luis
Fidel “luisfi” Pablolopez”, Fernando Torres
en Montañeros de Santa María
y Club de
Montaña 7 lagunas,
y a tantos
que llevo marcados
en la memoria
afectiva y auditiva
de mi corazón. Gracias mama
por tus nanas,
gracias querida abuela y tías por
vuestras nanas y
coplas que me
alegraron la infancia. Gracias a
todos los que poníais
un
“poquitín de MUZIQUITA “
en nuestras vidas , porque desde
entonces ya nunca
caminamos solos, siempre
nos acompañan la
memoria auditiva y
afectiva de
vuestras melodiosas y animosas notas alegrándonos
los
caminos y los
momentos de nuestras
biografías personales.