LOS LLAMADOS
CANIBALES DE LOS
ANDES : “NO TENIAMOS DERECHO
A DEJARNOS MORIR “
Era el
final de curso, era
el final de una
etapa de bachiller,
la mayoría se disponía
a
dar su definitivo adiós a
la etapa colegial,era el momento
en que aquellos chicos
alumnos del colegio
de los jesuitas
de Montevideo sintiéndose ya
universitarios para el
curso siguiente, en el adiós
a su
infancia , optan por
preparar una “pequeña
aventura “ . Como jugadores de rugbi
conciertan un partido de
rugby con los alumnos
del Colegio de los
jesuitas de Santiago de Chile, y algunos
ex alumnos ya
en la liga
universitaria uruguaya de
rugby se hacen
la ilusión de
montar “ casi un
partido internacional “ con sus
colegas de ex
alumnos de los
jesuitas de Chile.
. Para ahorrar
costes y por medio
de un familiar
conciertan el vuelo
de un bimotor
alquilado del ejército. Y
aquel 13 de
octubre de 1971
en el susodicho
bimotor parten 45
amigos de entre 16
a 23 años: “estábamos riéndonos todavía cuando
el piloto nos
ordenó atarnos los cinturones,
hasta que comprendimos
que aquello iba
en serio. El avión cae
en picado y se
desliza contra la
pared helada antes
de verse brutalmente
detenido por la
nieve “ .
No podía
creer
que estuviera vivo:” Estaban todos
nuestros amigos muertos
los heridos
gemían. Una auténtica pesadilla. Diecisiete pasajeros
han muerto en el
acto. El avión se había estrellado a
4. 000 metros de
altura donde por
la noche se pasaban
los 30 º bajo
cero. Arrastrándonos y hurgando
en aquel caos
de chatarra quemada y
equipajes logramos
encontrar algunos paquetes de
chocolate y tarros
de mermelada. Esperábamos que
nos rescataran pronto
pero… a medida que
pasaban los días y morían
los
heridos, nos dimos cuenta de que había
que
organizar la supervivencia. “ Todo
ello lo cuenta el
actual doctor Jorge Canesa,
hoy cardiólogo en Uruguay,
ex alumno de
los jesuitas y
entonces estudiante de
primero de medicina. Fue el
quien convenció a
sus compañeros de
que era preciso
comer la carne
de los cadáveres congelados
en medio de la
nieve a cuatro
mil metros de
altura para sobrevivir.
Suya es
por tanto la
idea que hará
estremecerse al mundo,
e incluso tema
de amplios debates actualmente
ya bien metidos
en el siglo XXI .
Actualmente
en gira por
muchas universidades del
mundo , se dedica a
dar cursos sobre
temas de fortaleza
mental, pensamiento positivo
y resiliencia: “Habían dejado
de buscarnos. El avión con
techo y panza
blanca estaba camuflado
en la nieve. Por nuestras
madres, nuestras novias,
no teníamos derecho a
dejarnos morir. La única
forma de
aplazar nuestra muerte era comer
los cuerpos congelados
de nuestros compañeros
y familiares. .En aquella época habíamos
perdido
20 kilos. Nos hicimos
aquella foto que
ha pasado a la
posteridad. El sol era
tibio estábamos llenos
de miedo y
frio, pero éramos
pura energía. No sabíamos si íbamos
a sobrevivir pero
aquella foto, representaba
para nosotros la posibilidad
de que
hubiese futuro. Después de 60 días, solo quedábamos
16
supervivientes. ” Roberto Canesa
y su amigo
Nando Parrado deciden jugarse
el todo por el todo y
atravesar aquel inmenso desierto de nieve, convertido en una
cárcel que los
atrapaba hacia la
muerte. Después de
10 días de
agotadora marcha, deteriorados,
física y psíquicamente, la aparición
de un
pastor les conduce
al mundo de los
vivos. VIVEN… la notica
da la vuelta
al mundo. Hacía
casi tres meses
que los habían dado
por muertos. Pasado el prime
r asombro una
parte de la opinión
pública
mundial se siente ofendida
por la “ vergonzosa supervivencia
caníbal 2 de aquellos
“héroes “. Aquella foto, “la
foto” concluye Canesa : << es
un homenaje a
los valores esenciales del hombre: amistad, solidaridad
y valor>>
http://antoniomarincara.blogspot.com.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario