“LA MUSICA
ME SALVÓ LA VIDA “(WILLY
DE VILLE)
Toda
una biografía donde
aprender. Cuando ponemos
en el curriculum nuestro
proceso y nombramos
universidades, prestigiosos colegios
donde estudiamos o
grandes empresas donde
nos curtimos y
aprendimos laboralmente a
desenvolvernos, surge siempre
esa “universidad “
, la de
la calle donde
mucha gente te
sorprende que aprendió
a “navegar por
la vida” .
Dice Willy
<< Soy un
criollo nacido en Nueva York, Mi padre
era carpintero y
mi madre, al
igual que casi
todas las madres, era
ama de casa y
madre de
sus hijos. Vivíamos con muchos
problemas familiares. Y
a los 14
años me marché
de casa c con un amigo
y me refugie
en la calle. Allí, en la
calle, había menos
violencia que en casa.
Y aprendí a ser
un pequeño criminal
y a sobrevivir
robando. Mi familia
fueron a partir d entonces
los gays, las
putas, los drogadictos
y los vagabundos. Tal vez
parezca algo extraño,
pero encontré mas
amor en la calle
que en mi
propia casa. Ahora vivo
en Nueva Orleans y allí
la
idea del sur late muy fuerte
en
las venas de
la gente. Por eso
siempre aposte por
el Sur no
solo en mis
canciones, de inspiración latina,
sino también en
mis querencias. Mi
abuela fue un
personaje decisivo en
mi vida afectiva. Siendo yo
pequeño me contó
que nuestra familia
venia de Irlanda y
del País vasco. Me
gusta mucho el
flamenco me entusiasma. En una
vida rota, una
infancia robada un día le
llaman para tocar
en un grupo
latino.
Y como
bien dice “la música
me
salvó la vida “
pues no tenia
futuro alguno, entre
bandas de golfos
latinos, mundo de
las mafias, de las
drogas, de la prostitución. Ese sentido
redentor de la música
que
ha salvado a
tantos niños y
a tantos jóvenes sumergidos
en el mundo
marginal de los
barrios más feroces
y atroces de
la violencia y
la marginación. Es todo
un ejemplo de
una vida y
una biografía que habría
que
explorar para hallar
ese “punto ardiendo
“ al que
agarrarse cuando todo
se hunde. La
vida afectiva de
un niño, la
familia, los afectos,
el sentido de
la vida… . Su gran
disco “Loup Garou “ es un
trabajo empapado de todo
el “ casticismo “ de
nueva Orleans, la
ciudad en la
que vive y
por la que
siente verdadera fascinación.
Cuando la música,
el escribir o una
pequeña ilusión como
el deporte constituye
un lugar como
tabla salvadora a
la que agarrarnos
cuando todo se
desmorona o se
hunde, en cuanto
a valores a
nuestro alrededor, es
algo que nos
debe llevar a
reflexionar profundamente en los valores
que hemos ido
dejando en nuestra
sociedad occidental de
la prisa y
el desafecto que
nos deshumaniza .
http://antoniomarincara.blogspot.com.es/
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